Incluir los zumos de frutas como parte de una dieta equilibrada favorece un óptimo funcionamiento del cerebro y posee múltiples beneficios para la salud de todo nuestro organismo. En concreto, optar por los zumos ecológicos aporta un extra de ventajas en comparación con el resto, ya que no contienen residuos tóxicos, azúcares añadidos, ni conservantes, previniendo así las alteraciones hormonales que provocan los zumos comerciales como consecuencia del empleo de pesticidas durante su producción.
El alto contenido de vitamina C, vitamina K, y ácido fólico que se encuentran en los zumos ecológicos está relacionado con una disminución de la fatiga, menores probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares y una mejora de la memoria, ayudando a evitar enfermedades como el Alzheimer. Además, ingeridos siempre en cantidades saludables, ayudan contra la aparición de enfermedades cancerígenas y ralentizan el envejecimiento gracias a los antioxidantes presentes en su composición.
Las frutas ecológicas se obtienen mediante una agricultura sostenible que promueve la fertilidad de la tierra y esto no sólo contribuye al bienestar del medio ambiente, sino que a la hora de exprimirlas para beber en zumo, se mantienen las propiedades y se aprovechan al máximo sus nutrientes. Por ello, este tipo de zumos ecológicos es el más saludable y su sabor es auténtico a la par que delicioso.
Ventajas según la fruta que elijas para tus zumos ecológicos
Según la fruta ecológica exprimida se obtendrán beneficios diferentes para el organismo, por lo que es importante conocer las propiedades de algunas de ellas y las ventajas que suponen:
- Granada y melón: son muy buenos aliados para bajar de peso, ya que contienen pocas calorías y, además, la vitamina A del melón ayuda a mejorar el funcionamiento ocular.
- Manzana y piña: actúan como antiinflamatorios y son ideales para una mejora de la memoria y fortalecimiento de las encías.
- Papaya y frambuesas: tienen funciones antioxidantes y son el secreto para lucir una piel radiante e hidratada.
- Kiwi y ciruela: combaten el estreñimiento, favoreciendo el tránsito intestinal y, como extra, el kiwi protege el sistema inmunológico.
- Plátano y fresas: reducen la fatiga y estimulan el sistema nervioso, combatiendo trastornos como la ansiedad.
- Moras y arándanos: controlan los niveles de azúcar en la sangre y reducen los riesgos de sufrir diabetes, así como accidentes cerebrovasculares.
En definitiva, los beneficios de los zumos ecológicos son amplios: hidratan el cuerpo, rejuvenecen la piel, retrasan el envejecimiento ,y consumiendo un sólo vaso, se puede cubrir la dosis diaria de algunas vitaminas necesarias para una salud óptima, como es el caso del zumo de naranja y la vitamina C. Si se combina la ingesta de frutas orgánicas enteras, con una dieta equilibrada y al menos un zumo ecológico a la semana, los beneficios y mejoras en el cuerpo del consumidor son perceptibles de manera casi inmediata.
